Título: The Karate Kid.
Dirección: Harald Zwart.
Guión: Michael Soccio.
Reparto: Jaden Smith, Jackie Chan, Taraji P. Henson.
Duración: 131 min.
Género: Drama, Artes marciales, remake.
Año: 2010.
Vale. No hace falta que nadie diga nada. Sé lo que pasa por tu mente. Yo soy así, puedo leer el pensamiento a través del espacio y el tiempo. Y lo que piensas es: "¡Un remake de Karate Kid! Esto es lo que nos faltaba". Pues, sí, mira tú por donde, aquí tenemos el estreno del verano. El remake de la legendaria película de 1984. Cuando los superhéroes están de capa caída, salen a la palestra las viejas ideas recalentadas.
¿Quién no quiso alguna vez ser Daniel Larusso? A mí aquella película me marcó de por vida. Y por si te lo estás preguntando, sí, soy así de viejo. Yo vi la Karate Kid original en su estreno, aunque no recuerdo demasiado, sólo que llovía, y que la sala de cine estaba muy oscura. Creo que aquel día me dormí en brazos de mi madre, pero en los años posteriores tuve ocasión de repetir la experiencia en cinta de vídeo. ¿Quién no se sabe esta película de pé a pá? ¿Quién no la ha visto alguna vez en las innumerables reposiciones que ha sufrido a lo largo de años? Pues en Hollywood han debido de pensar que ya se nos había olvidado. Y, por si eres de esos, te refrescaré un poco el argumento con las pequeñas variaciones que ha sufrido tras el salto.
Dre vive con su madre en Detroit hasta que, un buen día, y por asuntos de trabajo, han de trasladarse a Beijing. Sin padre, y con doce años, Dre sólo puede seguir a su madre a ese extraño mundo e intentar adaptarse a su nueva forma de vida El traslado sin embargo se hace duro, y más cuando Dre choca con un grupo de niños chinos que creen que han de poner al nuevo en su sitio. Las cosas se complican cuando Dre se enamora de su compañera de clase, la bonita y virtuosa violinista Mei Ying. El sentimiento es mutuo, pero los constantes acosos y el choque de culturas, pone su relación en una situación delicada. Perseguido por los chicos chinos (que además son avezados luchadores de kung-fu), sufre una encerrona cuando trata de vengar su humillación, y se lleva una buena paliza. Le salva in extremis Mr. Han, un hombre solitario y silencioso que hace las veces de fontanero cerca de la nueva casa de Dre.
En primer lugar, he de decir que la película tiene mal el título. Debería llamarse Kung-Fu Kid, porque aquí no vemos nada de karate que, además, es una disciplina japonesa, por lo que ni siquiera se la menciona en la película. El argumento es a grandes rasgos un calco de la película original; si cambiamos a Jaden (que, en honor al título, sí que es un "kid") por Ralph Macchio (que parecía que hubiera repetido diez años de instituo, y todavía siguiera ahí), California por China, y al legendario Pat Morita (que fue nominado al Oscar por aquella) por Jackie Chan, todo lo demás permanece inmutable casi escena a escena. Hay algunos detalles más, por supuesto, pero no se ha modificado la idea original ni la secuencia de acontecimientos, como tampoco la moralina que traía su argumento. Hay guiños a la original, como cuando Mr Han intenta atrapar moscas con un palillo, o algunas de las frases, pero no se ha intentado llevar nada más allá, excepto una cosa, las peleas. La coreografía de los golpes está más trabajada que en la original, más acorde a los tiempos que corren, y se ven a unos chicos muy ágiles y profesionales, incluido Jaden Smith. Macchio quedaría como una nenaza torpe al lado de estos chavales.
Si eres nostalgico y hace mucho que no ves la original, o si tienes hijos, puede ser una gran opción para sobrellevar los calores del verano en una sala de cine. Quizás resulte mucho mejor opción que el equipo A (¿qué les pasa últimamente con los años 80?). Eso sí, habrá que esperar hasta agosto para verla.
Una última advertencia para navegantes. Si llevas a tus hijos al cine, procura apartar todo objeto delicado de su camino durante los días siguientes (eso incluye jarrones, lámparas, marcos de foto y floreros) o puede que te encuentres con que alguna de estas cosas se ha llevado una patada voladora inesperada. Lo digo por experiencia.
¿Quién no quiso alguna vez ser Daniel Larusso? A mí aquella película me marcó de por vida. Y por si te lo estás preguntando, sí, soy así de viejo. Yo vi la Karate Kid original en su estreno, aunque no recuerdo demasiado, sólo que llovía, y que la sala de cine estaba muy oscura. Creo que aquel día me dormí en brazos de mi madre, pero en los años posteriores tuve ocasión de repetir la experiencia en cinta de vídeo. ¿Quién no se sabe esta película de pé a pá? ¿Quién no la ha visto alguna vez en las innumerables reposiciones que ha sufrido a lo largo de años? Pues en Hollywood han debido de pensar que ya se nos había olvidado. Y, por si eres de esos, te refrescaré un poco el argumento con las pequeñas variaciones que ha sufrido tras el salto.
(viene del salto)
Dre vive con su madre en Detroit hasta que, un buen día, y por asuntos de trabajo, han de trasladarse a Beijing. Sin padre, y con doce años, Dre sólo puede seguir a su madre a ese extraño mundo e intentar adaptarse a su nueva forma de vida El traslado sin embargo se hace duro, y más cuando Dre choca con un grupo de niños chinos que creen que han de poner al nuevo en su sitio. Las cosas se complican cuando Dre se enamora de su compañera de clase, la bonita y virtuosa violinista Mei Ying. El sentimiento es mutuo, pero los constantes acosos y el choque de culturas, pone su relación en una situación delicada. Perseguido por los chicos chinos (que además son avezados luchadores de kung-fu), sufre una encerrona cuando trata de vengar su humillación, y se lleva una buena paliza. Le salva in extremis Mr. Han, un hombre solitario y silencioso que hace las veces de fontanero cerca de la nueva casa de Dre.
En primer lugar, he de decir que la película tiene mal el título. Debería llamarse Kung-Fu Kid, porque aquí no vemos nada de karate que, además, es una disciplina japonesa, por lo que ni siquiera se la menciona en la película. El argumento es a grandes rasgos un calco de la película original; si cambiamos a Jaden (que, en honor al título, sí que es un "kid") por Ralph Macchio (que parecía que hubiera repetido diez años de instituo, y todavía siguiera ahí), California por China, y al legendario Pat Morita (que fue nominado al Oscar por aquella) por Jackie Chan, todo lo demás permanece inmutable casi escena a escena. Hay algunos detalles más, por supuesto, pero no se ha modificado la idea original ni la secuencia de acontecimientos, como tampoco la moralina que traía su argumento. Hay guiños a la original, como cuando Mr Han intenta atrapar moscas con un palillo, o algunas de las frases, pero no se ha intentado llevar nada más allá, excepto una cosa, las peleas. La coreografía de los golpes está más trabajada que en la original, más acorde a los tiempos que corren, y se ven a unos chicos muy ágiles y profesionales, incluido Jaden Smith. Macchio quedaría como una nenaza torpe al lado de estos chavales.
Si eres nostalgico y hace mucho que no ves la original, o si tienes hijos, puede ser una gran opción para sobrellevar los calores del verano en una sala de cine. Quizás resulte mucho mejor opción que el equipo A (¿qué les pasa últimamente con los años 80?). Eso sí, habrá que esperar hasta agosto para verla.
Una última advertencia para navegantes. Si llevas a tus hijos al cine, procura apartar todo objeto delicado de su camino durante los días siguientes (eso incluye jarrones, lámparas, marcos de foto y floreros) o puede que te encuentres con que alguna de estas cosas se ha llevado una patada voladora inesperada. Lo digo por experiencia.
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